Denominación de Origen Almansa ha superado con nota el complicado ejercicio de 2020. Pese a las restricciones y a las consecuencias de la pandemia originada por el Covid-19 en todo el mundo, el volumen de embotellado de nuestra denominación de origen creció un 8,3% en 2020 respecto al año anterior, para llegar a los 6,69 millones de botellas de vino vendidas en todo el mundo.
En este contexto, nuestra zona de producción ha vuelto a conseguir un nuevo récord de ventas en lo que a embotellado se refiere, después de que en 2019 se consiguiese superar por primera vez el pico de los seis millones de botellas de vino vendidas. Además, este dato supone también un crecimiento de más del 30% en los últimos cinco años, y un repunte espectacular del nivel de embotellado del 64% respecto al nivel de 2011, ejercicio en el que no se llegaban a las tres millones de botellas de vino. El objetivo es, según Adolfo Cano, presidente de DO Almansa, «que en 2021 se continúe con este crecimiento», algo que, si el ritmo de vacunación a nivel mundial no se retrasa y se cumple con lo previsto, nos permitirá conseguir.
Objetivo: los 7 millones de botellas en 2021
Adolfo Cano ha valorado como una noticia «excelente» el hecho de haber podido conseguir mejorar las cifras de 2019 pese a la pandemia. Cano explica que la clave de este nuevo repunte de ventas está en «el perfil internacional y exportador de nuestros vinos, que han ayudado a que podamos adaptarnos mejor a esta situación y a poder sortear cierres y confinamientos que han tenido lugar en muchos países».
Además, Cano especifica que «fue en el mes de junio, después de mayo, el momento en el que las ventas volvieron a despegar, especialmente fuera de España. La recuperación de inmediata del mercado chino también ayudó a recuperar ventas que se habían paralizado durante los meses más duros de pandemia». En este sentido, y destacando el importantísimo papel que tiene nuestra DO Almansa como valor añadido para nuestros vinos, Cano valora el hecho de que ahora más que nunca, el cliente final «busca vinos de mayor calidad, con un valor añadido, y eso es algo que se consigue a través del distintivo de calidad que aporta una denominación de origen».
También es cierto que hemos comprobado como hay países que estaban acostumbrados al consumo en casa que han mejorado sus importaciones de vinos de DO Almansa, lo que ha compensado las ventas que habitualmente se realizaban al sector de la hostelería».
